Contenido
(Lee al final el estudio contextual resumido de este devocional. Esperamos sea de bendición)
Palabra:
Porque son vida a los que las hallan, Y medicina a todo su cuerpo. Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida. (Proverbios 4:22-23)
Hay una intensidad y una urgencia en esta seria súplica de guardar tu corazón sobre todo lo demás, y en las Escrituras, el corazón es la sede de los pensamientos, la voluntad, la conciencia y las emociones. El corazón es el almacén de la sabiduría y de todo lo que influye en la vida y el carácter de un individuo, y Jesús nos recuerda que debemos amar al Señor, nuestro Dios, con todo el corazón, el alma, la mente y las fuerzas, con cada parte de nuestro ser interior. Hemos sido dotados de razón y de opciones, de emociones y de una voluntad, que está ligada a nuestro corazón, y que Dios nos ha dado para glorificarle y enriquecer nuestra vida.
Pero nunca hay que darles rienda suelta para que gobiernen nuestras vidas y dicten nuestras decisiones, porque los sentimientos no vigilados pueden fluctuar, las emociones no vigiladas pueden girar a su antojo, los pensamientos no vigilados pueden ir de un lado a otro como las olas del mar, y una voluntad no vigilada puede alejarnos del camino de la paz.
Hoy en día, el grito del mundo es que dejes que tu corazón te lleve a lo que tu corazón desee. Pero el corazón es más engañoso que cualquier otra cosa, y a menos que sea controlado y guardado sobre todas las cosas, influirá en nuestras vidas para el mal y no para el bien. Sí, debemos guardar nuestros corazones como la más alta prioridad, guardados sobre todo lo demás.
No se nos deja adivinar la razón de la intensidad y la urgencia de esta seria petición de guardar el corazón por encima de todo, porque el corazón es la fuente y el manantial de la vida, el corazón es el depósito de la vida – el tesoro de la verdad – el almacén de la sabiduría.
Cristo es nuestra vida, nuestra verdad y nuestra sabiduría, y el Señor escudriña el corazón y prueba la mente. Debemos guardar la verdad que ha sido derramada en nuestros corazones – el conocimiento de Aquel que nos ha sacado de las tinieblas a su luz gloriosa y que nos ha sacado de las puertas de la muerte y ha insuflado en nosotros el aliento de la nueva vida en Cristo.
Oración:
Señor, concédeme el discernimiento de entender las verdades de Tu Palabra, la sabiduría para poder aplicarlas diariamente en mi vida y la constancia para de ella servirte cada día, más y mejor, sin dudar, ni desmayar. Y ayúdame también Padre a guardar mi corazón sobre todas las cosas. Escudriña mi corazón y conoce mis pensamientos, y ve si hay algún camino perverso en mí. Que no siga mi propio corazón, sino que siempre sea guiado en el camino de la justicia por Ti. Amén.
Estudio Bíblico Contextual del Devocional de Hoy:
Resumen del capítulo Proverbios 4:
Los primeros nueve capítulos del libro de los Proverbios se centran en ensalzar el valor de la sabiduría divina. En este capítulo, el rey Salomón continúa transmitiendo este mensaje a su hijo. El consejo que da a sus hijos -posiblemente también a sus alumnos- en el capítulo 4 es similar a lo que dice en Proverbios 1:8-9; 2:1-6; 3:1-2, 21-26; 5:1-2; 6:20-22; 7:1-3, 24; y 8:22-36. Las palabras de este capítulo están tomadas en parte de un consejo que Salomón recuerda haber escuchado de su propio padre, David.
Referencias cruzadas por término – Proverbios 4:22-23:
Porque son vida a los que las hallan, Y medicina a todo su cuerpo:
Proverbios 4:4 – Y él me enseñaba, y me decía: Retenga tu corazón mis razones, Guarda mis mandamientos, y vivirás.
Proverbios 12:18 – Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada; Mas la lengua de los sabios es medicina.
Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida:
Eclesiastés 5:13 – Hay un mal doloroso que he visto debajo del sol: las riquezas guardadas por sus dueños para su mal;
Mateo 12:34-35 – ¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca. El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas.
Salmos 139:23-24 – Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno.
Jeremías 17:9 – Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?
Proverbios 23:19 – Oye, hijo mío, y sé sabio, Y endereza tu corazón al camino.
Santiago 1:14-15 – sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte.
Deuteronomio 4:9 – Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, para que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; antes bien, las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos.
Hebreos 12:15 – Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados;
Proverbios 22:5 – Espinos y lazos hay en el camino del perverso; El que guarda su alma se alejará de ellos.