10 de Agosto: La naturaleza de Su amor

Publicado por

Palabra:

Pues como el joven se desposa con la virgen, se desposarán contigo tus hijos; y como el gozo del esposo con la esposa, así se gozará contigo el Dios tuyo. (Isaías 62:5)

Una importante representación de Dios y de cómo se siente Él en cuanto a estar en relación constante con nosotros puede verse cuando Él se describe como un Esposo que intencionalmente nos desposa con Él en eterna fidelidad, amor y tierna misericordia (Isaías 54:5).

Exactamente lo que siente un novio por su novia es lo que siente Dios por nosotros, lleno de una emocionante anticipación respecto a todos los años por venir. Él no quiere una relación casual e intermitente con nosotros. Ha hecho todo lo que puede para asegurarse de que podamos conocerlo y estar con Él para siempre.

Qué triste que tantas personas se imaginen a un Dios que apenas puede con ellos. Ven a un Dios molesto y perturbado, quien, de alguna manera, debe tolerar a las personas que en realidad no le importan. Para estas personas, si les va bien, su relación con Dios es tenue y está basada solamente en su habilidad de hacer las cosas adecuadamente. Debido a que no comprenden la unión familiar que Dios quiere tener con ellos, sienten que tienen que vivir cumpliendo con ciertos estándares con el fin de ser aceptables a Él. La tragedia es que nadie puede ser lo suficientemente bueno(a) por sí mismo(a) para mantener una relación con Dios. Las personas que no captan cuánto Dios mismo quiere mantener una relación con nosotros, terminan sintiendo resentimiento hacia Él. Sienten culpa con rabia.

Qué contraste tiene tal punto de vista con la verdad acerca de Dios. Su amor es tan poderoso, Su deseo de cercanía eterna con nosotros es tan apremiante, que estuvo dispuesto a renunciar a todo lo que es más valioso para Él con el fin de restaurar con nosotros la relación que estaba perdida.

Lo que Él sacrificó y por qué tenía que restaurar nuestra relación quebrantada con Él, es en realidad la historia de la Biblia.  La verdad más importante que hay que recordar es que Dios siempre quiere una relación con nosotros, más de lo que nosotros la queremos con Él. Él es el que inicia y el que restaura nuestra relación con Él.

Nunca tienes que preguntarte si Dios te quiere cerca de Él. Sea como sea, Él te quiere. Pase lo que pase, hagas lo que hagas, cualesquiera que sean las decisiones que tomes, puedes estar completamente seguro de que Dios, nuestro Padre celestial, nuestro Esposo, nuestro Hacedor, siempre quiere tenerte cerca de Él. Y va a utilizar cualquier situación de tu vida para revelarte más de Sí mismo.

Puesto que Dios es Dios, quien tomó todas las decisiones iniciales respecto a cómo iba a ser configurada la realidad y quien tiene la última palabra, Él puede ser como quiere. Nadie podría decirle cómo debería ser. No tuvo consejero alguno en la creación

Si Dios hubiera querido ser arbitrario, caprichoso, injusto, cruel, rencoroso o descuidado, Él podría haberlo sido. Pero decidió amarnos y se acercó a nosotros.

Hoy, yo decido acercarme a él y disfrutar de su intimidad.

Oración:

Señor, ayúdame a aprovechar este día cada momento contigo. Amén.