Contenido
(Lee al final el estudio contextual resumido de este devocional. Esperamos sea de bendición)
Palabra:
«Y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo» (Juan 16:32)
Durante la preparatoria y en mi vida en la universidad como estudiante, siempre conté afortunadamente con muchos amigos. Solíamos salir y compartir cada semana como grupo haciendo diversas actividades juntos.
Al madurar me di cuenta de que tener muchas personas a mi alrededor, no era garantía de evitar la soledad, porque a pesar de contar con su apoyo la mayor parte del tiempo, las inquietudes y aflicciones que me embargaban en ciertos momentos, sólo podían ser superadas acercándome a Dios en profunda oración.
En las escrituras de hoy, se evidencia como Jesús experimentó y dio cuenta de este tipo de soledad. En su maravilloso y desprendido servicio en nombre del Señor, seguro se percató de esa misma soledad en la mirada de los leprosos, en la voz tenue de los ciegos y con mayor intensidad ese día en que sus seguidores más cercanos lo abandonaron.
Sin embargo, al asegurar que el abandono de sus discípulos era el reflejo fiel del cumplimiento de la profecía, Jesús expreso su inalterable confianza en El Señor al asegurar: «y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo» (Juan 16:32) Jesús asumió como necesario su destino y descanso en El Padre, por nosotros, esa gran carga.
Como seres humanos, serán constantes los momentos de soledad, incluso aquellos que no pueden superarse de manera sencilla, con aquellas personas cercanas cuyo apoyo es incondicional. Pero en esos momentos debemos recordar el ejemplo de Jesús y asumir con la misma fe que Dios está con nosotros siempre. Él es omnipresente y eterno y es el único que puede acompañarnos todo el tiempo y para todo.
En nuestra condición de seres humanos, todos experimentaremos momentos de soledad, pero Cristo nos ayuda a entender que nuestro Padre celestial está con nosotros siempre. Él es omnipresente y eterno; el único que puede acompañarnos todo el tiempo y para todo.
Oración:
Señor, gracias por estar presente para mí en cualquier momento. Sólo Tú me escuchas y das respuesta a mis súplicas, Sólo Tu rescatas mi alma y espíritu de las más desoladoras aflicciones que invaden mi corazón. Gracias Señor, Amén.
Estudio Bíblico Contextual del Devocional de Hoy:
Pasaje:
Juan 16:32
Tema del Capítulo – Juan 16:
En Juan 16, el Jesús sigue dando instrucciones a sus discípulos, antes de ser arrestado, condenado, torturado y crucificado por los judíos y los romanos.
El Maestro deja claro que, debido a su fe en él, habrá oposición y adversidad en sus vidas, pero la presencia de Dios estará con ellos continuamente, todos los días.
Al notar la tristeza en sus rostros, Jesús comenzó a hablar del ministerio consolador del Espíritu Santo y de su obra para conducir al pecador al arrepentimiento.
Para que venga, Jesús necesitaba volver al Padre.
Jesús dice a los discípulos cómo el Espíritu los guiará y consolará, incluso en medio de la mayor adversidad. Luego promete la alegría en lugar de la tristeza y la paz en medio de las aflicciones.
Esbozo de Juan 16:
16:1 – 4: Las adversidades de la vida con Cristo
16:5 – 11: La promesa de la presencia de Dios
16.12 – 15: El ministerio de la enseñanza del Espíritu Santo
16:16 – 19: A través del Espíritu Santo
16:20 – 24: La alegría en lugar del dolor
16:25 – 28: La victoria a través de nuestra relación con el Padre
16:29 – 30: La promesa de comprensión
16:31 – 33: La paz en medio de las aflicciones
Comentario Bíblico Juan 16:32:
.He aquí una clara afrimación de la venida de Cristo desde el Padre y de su regreso a Él. En su venida el Redentor fue Dios manifiesto en carne, y en su Partida fue recibido en gloria. Los discípulos aprovecharon el conocimiento diciendo eso; también, en fe: “ahora estamos seguros”. ¡Sí! No conocían su propia debilidad. La naturaleza divina no desertó de la naturaleza humana, pero la sostuvo y dio consuelo y valor a los sufrimientos de Cristo. Mientras tengamos la presencia favorable de Dios estamos felices y debemos estar tranquilos, aunque todo el mundo nos abandone. La paz en Cristo es la única paz verdadera, los creyentes la tienen en Él solamente. A través de Él tenemos paz con Dios y, así en Él tenemos paz en nuestra mente. Debemos animarnos porque Cristo ha vencido al mundo ante nosotros, pero mientras pensemos que resistimos, cuidemos de no caer. No sabemos cómo debemos actuar y entramos en tentación: estemos alertas y orando sin cesar para que no seamos dejados solos.
Referencias Cruzadas:
Mateo 26:31 – Entonces Jesús les dijo: Todos vosotros os escandalizaréis de mí esta noche; porque escrito está: Heriré al pastor, y las ovejas del rebaño serán dispersadas.
Zacarías 13:7 – Levántate, oh espada, contra el pastor, y contra el hombre compañero mío, dice Jehová de los ejércitos. Hiere al pastor, y serán dispersadas las ovejas; y haré volver mi mano contra los pequeñitos.
Marcos 14:27 – Entonces Jesús les dijo: Todos os escandalizaréis de mí esta noche; porque escrito está: Heriré al pastor, y las ovejas serán dispersadas.
Juan 4:23 – Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.
Juan 16:25 – Estas cosas os he hablado en alegorías; la hora viene cuando ya no os hablaré por alegorías, sino que claramente os anunciaré acerca del Padre.
Juan 14:10-11 – ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras. Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras.
Marcos 14:50 – Entonces todos los discípulos, dejándole, huyeron.
Hechos 8:1 – Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.
Juan 5:28 – No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz.