«El, mirándole fijamente, y atemorizado, dijo: ¿Qué es, Señor? Y le dijo: Tus oraciones y tus limosnas han subido para memoria delante de Dios» (Hechos 10:4)
A algunos los han maltratado, a otros les han matado sentimientos, ilusiones y sueños, a otros los han privado de libertad, algunos físicamente o emocionalmente y a otros los han expuesto a la vergüenza pública. Sin embargo, aunque en Hecho 12 los primeros cuatro versos presentan este panorama, el verso 5 dice: “Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel; pero la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él. Aleluya!!! Acá está una iglesia que hace oración sin cesar ante el maltrato, la muerte , la privación de libertad y la exposición a la vergüenza pública de sus líderes.
El ambiente no era muy saludable, ya que el verso 6 dice que Pedro dormía entre dos soldados, sujeto con dos cadenas, y los guardas delante de la puerta custodiaban la cárcel y se habían asignado 12 soldados para un hombre inerme como Pedro. ¿Por qué?
Seguro estoy que Herodes sabía la vida devocional de Pedro. Herodes sabía que Pedro servía a un Dios vivo y poderoso. Herodes no había olvidado lo que había sucedido en día de la resurrección de Jesús y lo acontecido en el capítulo 5 de Hechos cuando Pedro fue liberado de la cárcel por un ángel. Buena cosa es cuando nuestro enemigo está consciente que los creyentes en Dios tenemos buena vida devocional.