Contenido
(Lee al final el estudio contextual resumido de este devocional. Esperamos sea de bendición)
Palabra:
Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas. (2 Corintios 4:17-18)
Pruebas. Algunas son breves en el tiempo. Pero otras son asuntos interminables que duran varias semanas, meses o persisten, incluso durante años inacabables. Algunas pruebas son más fáciles de soportar que otras, mientras que algunas son extremadamente intensas.
Nos preguntamos si seremos capaces de aguantar hasta el final. Nos preguntamos si merece la pena, si le importa a Dios. Nos preguntamos por qué estamos padeciendo la prueba. ¿Cuál es el propósito?
Job también cuestionó a Dios, y se preguntó en voz alta por qué Dios, que una vez lo había bendecido con riquezas, una gran familia y prestigio, se había vuelto ahora en su contra. En el libro de la Biblia donde se cuenta su historia, el lector ve desde el principio por qué Dios permitió que Satanás le quitara a Job todas sus posesiones e hijos, y, más tarde, su salud. Pero Job nunca lo supo. Y, al final, no le importó.
Se nos indica que Job nunca pecó con su boca. Por tanto, a pesar de que lo inundaran las preguntas, las formuló con respeto, y buscó de verdad las respuestas, no de un modo acusatorio ni blasfemo. Al final, Lo único que Dios le respondería sería que su percepción de Dios era demasiado pequeña. Y, al final, Dios bendijo a Job con el doble de animales y riqueza, y con más hijos. No se nos indica cuánto duró la prueba de Job ni durante cuánto tiempo le “bendijeron” sus amigos con su presencia y su “estímulo” (léase desánimo). Pero eso no importa en realidad. Pablo alentó a los creyentes corintios explicándoles que, a la luz de la eternidad, nuestras pruebas aquí en la tierra son ligeras (no demasiado pesadas para nosotros) y momentáneas.
Piensa de nuevo en los principios básicos de la geometría: una línea recta con una flecha en cada extremo, indica el infinito. Imagina un solo puntito en esa línea. Esa es tu vida, Santiago la denomina neblina, que hoy está aquí, y mañana se va. Y eso es lo que Pablo quiere decir cuando indica que nuestros problemas aquí en la tierra son momentáneos.
¡Qué promesa! ¡Y cuánto aliento hay en este versículo! La cantidad de problemas que experimentamos aquí es, francamente, una neblina, el puntito más diminuto en la línea infinita que es la eternidad.
Oración:
Señor, transforma mi corazón para que no vea yo las consecuencias pasajeras de los problemas que enfrento, sino la lección, que de ellos quieres darme para ser digno de las promesas eternas que guardas para cada uno de tus hijos.
Estudio Bíblico Contextual del Devocional de Hoy:
Resumen del Capítulo – 2 Corintios 4
En 2 Corintios 4, Pablo habla de que la gente no entiende ni cree en la Palabra de Dios. Atribuye este efecto a la actuación del dios de este tiempo, el Diablo, que ha bloqueado el entendimiento de los incrédulos.
El apóstol reconoce que los maravillosos frutos de su ministerio son el resultado de la persona del Espíritu Santo que actúa en él. Sin embargo, ha pagado un precio por ello.
Dice que lleva sobre sí la muerte de Jesucristo. Las luchas, tribulaciones y adversidades son fruto de la relación del ser con Dios.
Sin embargo, esta «leve y momentánea tribulación» está produciendo una gloria que los sufrimientos de la tierra no son capaces de superar. A partir de esto, Pablo dice que pone sus ojos en lo que es eterno.
Esbozo de 2 Corintios 4:
4.1 – 5: El dios de este tiempo ha cegado a los incrédulos
4:6-9 Las vasijas de barro
4:10 – 15: La muerte de Jesucristo
4:16 – 18: Sufrimientos leves y temporales
Comentario 2 Corintios 4:17-18
La gracia de la fe es un remedio eficaz contra el desaliento en tiempos de prueba. Ellos sabían que Cristo había resucitado y que su resurrección era arras y garantía de la de ellos. La esperanza de esta resurrección animará en el día de sufrimiento y nos pondrá por encima del temor a la muerte. Además, sus sufrimientos fueron para el provecho de la Iglesia y para la gloria de Dios. Los sufrimientos de los ministros de Cristo, y su predicación y conversación, son para el bien de la Iglesia y para la gloria de Dios. La perspectiva de la vida y la dicha eternas eran su fortaleza y consuelo. Lo que el sentido estaba dispuesto a considerar pesado y largo, doloroso y tedioso, la fe lo percibe leve y corto y sólo momentáneo. El peso de todas las aflicciones temporales era leve en sí, mientras la gloria venidera era una sustancia de peso y duración más allá de toda descripción. Si el apóstol pudo llamar leves y momentáneas a sus pruebas pesadas, largas y continuas, ¡qué triviales deben de ser nuestras dificultades! La fe capacita para efectuar el recto juicio de las cosas. Hay cosas invisibles y cosas que se ven, y entre ellas hay esta vasta diferencia: las cosas invisibles son eternas, las cosas visibles son temporales o sólo pasajeras. Entonces, no miremos las cosas que se ven; dejemos de buscar las ventajas mundanales o de temer los trastornos presentes. Pongamos diligencia en hacer segura nuestra futura felicidad.