(Lee al final el estudio contextual resumido de este devocional. Esperamos sea de bendición)
«Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia, Y su verdad por todas las generaciones» (Salmos 100:5)
El Salmo 100 es como una obra de arte que nos ayuda a honrar a nuestro Dios invisible. Aunque el objeto de la adoración no puede verse, su pueblo lo da a conocer.
Imagina al artista, con paleta y pinceles, plasmando las coloridas palabras de este salmo sobre su tela, y lo que se devela ante nuestro ojos es un mundo, «habitantes de toda la tierra», que cantan gozosos al Señor (v. 1). Gozosos porque Dios se deleita en redimirnos de la muerte. Por eso, Jesús soportó la cruz: «por el gozo puesto delante de él» (Hebreos 12:2).
Mientras nuestros ojos recorren la tela, podemos ver un coro mundial innumerable que canta «con alegría» y «con regocijo» (Salmo 100:2). El corazón de nuestro Padre celestial se siente complacido cuando su pueblo lo adora por lo que Él es y lo que ha hecho.
Luego, nos vemos nosotros, su pueblo, como polvo en las manos de nuestro Creador y ovejas en pastos verdes (v. 3). Tenemos un Pastor que nos ama.
Por último, vemos la maravillosa morada del Señor y las puertas a través de las cuales entran en su presencia los redimidos, mientras le dan gracias y lo alaban (v. 4). Qué gran cuadro inspirado por un Dios bueno, amoroso y fiel.
Recuerda, cuando entendemos la grandeza del Señor, lo infinito de Su amor y lo perfecto de Su misericordia, podemos comenzar a caminar con Él y vivir en su majestad, reconociendo y honrando Su presencia en nuestras vidas y sirviéndole y glorificándole en cada paso que damos.
Palabra Diaria: Señor, concédeme la sabiduría para conducirme siempre por Tus caminos, de manera que merezca vivir en tu grandeza y disfrutar de Tu misericordia y amor, que no poseen fin. Dame fuerzas para no decaer y servirte siempre con fidelidad y gratitud, de todo corazón.
Estudio Bíblico Contextual del Devocional de Hoy:
Resumen del Capítulo – Salmos 100
En el Salmo 100, el salmista compone uno de los salmos más amados y cantados en toda la tierra, por el pueblo de Dios. Salmos 100 ha formado y forma parte de cientos de miles de reuniones en todo el mundo.
En dicho Salmo se nos invita a celebrar al Señor con júbilo, pero no sólo a nosotros, sino a todos los habitantes de la tierra. En otras palabras, es un salmo que profetiza el reinado mundial de Jesucristo. La razón de tal alabanza es que Él nos ha hecho, y nosotros somos suyos: somos su pueblo y el rebaño de su pastor.
No somos obra del azar, fruto de una mera explosión. Somos la obra de Dios, la obra de sus manos. Dios nos planeó, pensó en nosotros y todo lo que hizo fue para que tuviéramos lo mejor aquí en la tierra.
¿Te has detenido alguna vez a reflexionar sobre la grandeza y la bondad de Dios, que se manifiestan en la Creación?
¿Has observado alguna vez la puesta de sol? ¿Por qué tantos colores? ¿Ese maravilloso degradado de naranja y amarillo? ¿Por qué hay pájaros de tantos colores y picos diferentes?
¿Por qué las estaciones a la Tierra? ¿Por qué seres microscópicos? ¿Por qué esas estrellas tan grandes? ¿Por qué somos tan diferentes? ¿Por qué una fauna y una flora tan diversas?
Porque «Jehová es bueno; para siempre es su misericordia, Y su verdad por todas las generaciones.» (v. 5). Todo lo que hay en la creación es la forma que tiene Dios de decirnos lo mucho que nos ama y lo importantes que somos para él.
Así que cada vez que pienses en quejarte, o posiblemente, en medio de la desesperación pensar o decir que El Señor se ha olvidado de ti y que nada funciona, mira la creación. ¡Mira lo mucho que ha hecho por ti!
Esbozo de los Salmos 100:
100.1,2: Alégrate en el Señor
100.3: Él nos ha hecho
100.4,5: Con acción de gracias