Versículo:
!!Cuán amables son tus moradas, oh Jehová de los ejércitos! (Salmos 84:1)
Comentario:
Esta semana, me gustaría compartir con ustedes cómo estar en la presencia de Dios puede llenar nuestros corazones de alegría y placer. De hecho, «la alegría y el placer» son sensaciones que las personas han buscado intensamente y de diversas maneras.
Al celebrar su servico al Señor, el salmista del texto de esta semana subraya lo valioso que era para él estar en el lugar donde Dios se manifestaba a sus siervos. No precisamente por el lugar en sí, sus muros, su forma, su tamaño, ni siquiera por las personas que estarían allí, incluyendo aquí al Sacerdote que era el vínculo entre Dios y los hombres.
El salmista canta su alegría y placer porque allí, en los tabernáculos (lugar apartado para el culto), Dios estaría presente, es decir: la presencia del Señor es el factor que genera e impulsa la alegría del siervo.
La gente tiende a buscar grandes edificios (templos), entidades religiosas famosas y líderes carismáticos y elocuentes, para encontrar alegría y placer; algunos incluso están dispuestos a hacer grandes ofrendas para conseguir lo que buscan.
Pero acaban por no darse cuenta de que sólo necesitan encontrarse con el Señor para experimentar la alegría y el placer que produce su presencia.
Oración:
Señor, que disfrute cada día de la alegría y paz de contar contigo y con Tu presencia liberadora, en cada paso que dé.