Versículo diario comentado: 1 Corintios 13:1-2

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Versículo:

Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe. Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy. 1 Corintios 13:1-2

Comentario:

El pasaje bíblico de hoy se conoce como el capítulo del amor. Es interesante que Pablo no haya dado una definición del amor, sino descrito su importancia y su expresión.

Este tipo de amor no es de origen humano; viene de nuestro Padre celestial y es parte de su naturaleza (1 Jn 4.16). Lo que describe el apóstol es un amor altruista que actúa a favor de otra persona. El deseo de Dios es transformar a todos los creyentes a la imagen de Cristo (Ro 8.29). Y somos más como Él cuando cuidamos los unos de los otros.

Los primeros tres versículos de 1 Corintios 13 son una advertencia. Sin la motivación del amor, todas nuestras buenas obras, incluyendo el servicio al Señor, no nos beneficiarán en nada. A los ojos de Dios, un espíritu amoroso es más importante que palabras impresionantes, conocimiento, fe, generosidad y sacrificio. Cuando nos presentemos ante Cristo para ser juzgados por nuestras obras, cualquier acción realizada por razones egocéntricas no será considerada digna de recompensa.

Todos estamos ciegos hasta cierto punto con respecto a nuestros motivos, por lo que puede ser difícil discernir por qué servimos a Dios o hacemos buenas obras. Ore para conocer las intenciones ocultas de su corazón, y pídale al Señor que sustituya cualquier motivación egocéntrica con la manera en que Él ama.

Oración:

Señor, purifica las intenciones de mi corazón y reemplaza cualquier motivación egocéntrica con tu amor divino. Ayúdame a servirte y a hacer buenas obras con un espíritu amoroso y desinteresado. Transfórmame a la imagen de Cristo, para que mi vida refleje tu amor verdadero y mis acciones sean dignas de tu recompensa. En El Nombre de Jesús, Amén.