Biblia Devocional en 1 Año: Amos 1

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Amos 1: Oráculo contra varias naciones

Amós 1 es el comienzo del libro del profeta Amós, quien fue llamado por Dios para proclamar juicio sobre Israel y las naciones vecinas debido a su injusticia y pecado. Este capítulo inicia con una serie de oráculos contra varias naciones, destacando la justicia de Dios y su intolerancia hacia la opresión y la violencia.

Visión y Llamado de Amós (Amós 1:1-2)

El libro comienza con una introducción sobre el profeta: «Las palabras de Amós, que fue entre los pastores de Tecoa, las cuales vio acerca de Israel en días de Uzías rey de Judá, y en días de Jeroboam hijo de Joás, rey de Israel, dos años antes del terremoto» (Amós 1:1, Reina-Valera 1960). Amós era un pastor y recolector de higos sicómoros de Tecoa, un pequeño pueblo en Judá.

Dios se revela a Amós con una poderosa imagen: «Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén; y los campos de los pastores se enlutarán, y se secará la cumbre del Carmelo» (Amós 1:2). Esta visión del rugido de Dios desde Sion simboliza la inminente proclamación de juicio.

Oráculos contra las Naciones Vecinas (Amós 1:3-15)

Amós pronuncia juicio contra varias naciones vecinas de Israel, comenzando con Damasco:

1. Damasco (Amós 1:3-5)
«Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Damasco, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque trillaron a Galaad con trillos de hierro» (Amós 1:3). Dios condena a Damasco por su crueldad y brutalidad contra Galaad. El castigo será la destrucción de sus palacios y la deportación de su pueblo.

2. Gaza (Amós 1:6-8)
«Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Gaza, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque llevó cautivo a todo un pueblo para entregarlo a Edom» (Amós 1:6). Gaza es condenada por su tráfico de esclavos, y su castigo será la devastación y la pérdida de su poder.

3. Tiro (Amós 1:9-10)
«Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Tiro, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque entregaron a todo un pueblo cautivo a Edom, y no se acordaron del pacto de hermanos» (Amós 1:9). Tiro es acusada de traicionar un pacto de hermandad y de comerciar con esclavos. Su castigo será la destrucción de sus murallas y palacios.

4. Edom (Amós 1:11-12)
«Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Edom, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque persiguió a espada a su hermano, y violó todo afecto natural; y en su furor le ha robado siempre, y ha perpetuado su enojo para siempre» (Amós 1:11). Edom es condenado por su implacable enemistad y crueldad hacia Israel. Su castigo será la devastación de sus ciudades.

5. Amón (Amós 1:13-15)
«Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de los hijos de Amón, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque abrieron a las mujeres encintas de Galaad para ensanchar su territorio» (Amós 1:13). Amón es condenado por su violencia extrema y deseo de expansión territorial. Su castigo será el fuego en sus murallas y la derrota en la guerra.

Versículo Clave de Amós 1: Amós 1:2

«Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén; y los campos de los pastores se enlutarán, y se secará la cumbre del Carmelo.» (Amós 1:2)

Amós 1:2 es un versículo clave que encapsula la poderosa proclamación de juicio de Dios. Este versículo destaca la soberanía y la justicia de Dios, así como la seriedad de la situación que enfrenta Israel y las naciones vecinas.

El Rugido de Jehová:

«Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén» describe la manifestación poderosa y audible de la presencia de Dios. El rugido simboliza la autoridad y el poder del Señor al pronunciar juicio desde su lugar santo.

Consecuencias del Juicio:

«Y los campos de los pastores se enlutarán, y se secará la cumbre del Carmelo» sugiere que este juicio tendrá un impacto tangible y devastador en la tierra. Los campos y el monte Carmelo, conocidos por su fertilidad, se marchitarán, simbolizando la gravedad del castigo divino.

Oración:

Señor, que por Tu perfecta justicia, comprenda los peligros que vienen de alejarme de Ti, y que de ellos tenga presente una razón para seguirte, y servirte en todo lo que haga, manteniendo siempre el compromiso de avanzar siempre conforme a Tu voluntad, que es la de más alto bienestar para cada uno de Tus hijos. En El Nombre de Jesús, Amén.