Oración de Protección Contra El Mal
Amado Padre celestial,
Hoy me acerco a Ti con un corazón humilde, reconociendo que solo en Tu presencia encuentro el refugio seguro que mi alma anhela. Tú eres mi amparo y mi fortaleza, mi Dios en quien confío. Como declara Tu Palabra en el Salmo 91:1, “El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente.” Señor, anhelo vivir cada día bajo Tu sombra protectora, encontrando descanso en Tu fidelidad inmutable.
Y a quien más Padre, podría yo clamarle en mi angustia todos estos favores, si tu conoces todo mi ser, desde fromado del vientre de mi Madre. Sabes mis luchas, mis batallas y mis miedos. Por ello quiero Señor, quen en los momentos en que mis pensamientos se vean invadidos por el temor y la incertidumbre. Y me enfrente a desafíos que parecen demasiado grandes para mí, derrotes la inquietud que reina en mi corazon y me permitas confiar en la poderosa promesa del Salmo 91:5: “No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día.” Asi, confiando en esta Palabra Señor, de que encuentro seguridad y paz, sabiendo que Tu presencia me rodea en cada momento y que nada escapa de Tu vista.
En medio de un mundo lleno de incertidumbre y peligros, declaro que Tú eres mi refugio y mi castillo, el escudo que me rodea y la roca firme en la que puedo apoyarme. No temeré, porque sé que Tú estás conmigo, sosteniéndome con Tu mano poderosa y guiándome por sendas de justicia.
Señor, invoco Tu presencia sobre mi vida, sobre mi hogar, sobre mi familia y sobre todo lo que me rodea. Te pido que me cubras con Tu paz y me abraces con Tu amor protector. Que Tu poder sea mi escudo y fortaleza ante cualquier adversidad que intente robarme la paz.
Padre, hoy declaro con fe que en Ti encuentro seguridad, descanso y protección. Confío en que cada paso que doy está bajo Tu cuidado divino y que nada escapa de Tu control. Gracias por ser mi refugio eterno, mi sombra en el calor del día y mi luz en la oscuridad de la noche. Que Tu presencia nunca me falte Señor. Te lo pido, En El Nombre de Jesús, Amén.