Publicado por (Lee al final el estudio un devocional de 1 Cronicas 3. Esperamos sea de bendición para ti.)
Resumen
El sentido de 1 Crónicas 3 trata de la enumeración de la familia de David y su descendencia. Así que David tuvo seis hijos que nacieron en Hebrón . Así reinó siete años y seis meses.
Resúmen de versículos
1 Crónicas 3
3.1-5 El hecho de que David tuviera seis hijos con seis esposas en Hebrón no significa que fuera polígamo. David siguió la costumbre real de casarse con las hijas de los reyes vecinos para tener así más aliados. Sin embargo, de estos matrimonios múltiples surgieron inevitablemente resultados negativos. Amnón, el primer hijo de David, violó a su hermanastra Tamar (2 Sam. 13:14), acto por el que pagó con su vida, muriendo a manos de su hermanastro Absalón. Más tarde, Adonías intentó usurpar el trono a Salomón, a quien le había sido prometido (1 Re 1,5-10).
3.5 Betsabé. También llamada Betsabé.
3.6-9 Tamar. El hecho de que sólo se mencione a una hija de David no significa que no tuviera otras. Tamar aparece en esta genealogía debido a su prominencia en la historia familiar del rey David (2 Sam. 13:1-39). El cronista incluyó en ella a aquellas personas que tenían una relevancia específica para la narración y su propósito teológico.
3.10-18 Senazar y Sesbasar (Ed 1.8,11) eran probablemente el mismo hombre que dirigió al primer grupo de judíos que regresó del cautiverio babilónico y construyó los cimientos del segundo templo (Ed 5.15-17).
3.19 En este contexto, se dice que Zorobabel es hijo de Pedaías. Sin embargo, en Esdras 3.2,8; 5.2; Nehemías 12.1 y Hageo 1.12,14; 2.2,23, es hijo del hermano de Pedaías, Salatiel (1 Cr. 3.17). Es probable que Salatiel muriera cuando Zorobabel era joven y que Zorobabel fuera criado por su tío Pedaías. Por lo tanto, habría sido hijo de consideración de Pedaías. Esta relación puede explicar lo que sostiene Lucas: que Zorobabel era hijo de Salatiel (Lc 3.27), quien, a su vez, era descendiente de David a través de su hijo Natán. Por lo tanto, en los evangelios, el linaje de Jesús se remontó a David, a través de los dos hijos de David, Salomón y Natán. Este linaje entre Jesús y David se produjo a través del matrimonio de la hija de Jeconías con Salatiel. Lucas trazó el linaje de Jesús a través de Zorobabel y otro hijo desconocido llamado Resha (Lc 3.27). Mateo, cuyo interés se centra en José, remonta la genealogía de Jesús hasta Zorobabel a través de otro hijo, llamado Abiud (Mateo 1.13). Lucas, por tanto, reconstruyó la genealogía de María; Mateo hizo lo mismo con José, y Crónicas trazó una tercera línea de David. Sin embargo, todas las genealogías pasaban por Zorobabel y se originaban con David.
3.20-24 Pelatías y Jesaías parecen ser los únicos hijos de Hananías. Refaías […] Secanías. Tales nombres han sido señalados de la genealogía de Zorobabel, pues deben ser otras familias davídicas. Los hijos de Secanías. Se enumeran cuatro generaciones de Secanías, que terminan en Anani, por lo que la genealogía del versículo 17 al 24 presupone unas siete generaciones. Puesto que Jeconías reinó a mediados del 598 a.C. (1 Crón. 3:17), Anani debe ser del 425 a.C., siendo la última generación registrada en Crónicas, y cualquier datación del libro debe tener esto en cuenta.
Devocional:
Estos son los hijos de David que le nacieron en Hebrón: Amnón el primogénito, de Ahinoam jezreelita; el segundo, Daniel, de Abigail la de Carmel. (1 Crónicas 3:1)
Un hombre según el corazón de Dios. Así se hace referencia al linaje de David en este capítulo, lo que nos lleva a comprender la gracia perdurable del Cielo. David es mencionado en la lectura de ayer como el séptimo hijo de Jesé. En Hechos 13:22 Dios llama a David como un hombre conforme a Su corazón y voluntad.
¿Podemos referirnos como «según el corazón y la voluntad de Dios» a una línea de cuatro hijos procedentes de una relación nacida en adulterio? Observe la paciencia de Dios mientras se desarrolla el descenso de David. Salomón, el hijo ilegítimo de Betsabé y David, figura en el árbol genealógico de Jesús (Mateo 1:6).
El examen de esta línea adúltera sólo puede llevarnos a una conclusión. Mire a Cristo para ver que aunque nuestras circunstancias parezcan manchar nuestro linaje, es en Cristo donde se define nuestro legado. David, con sus propias palabras, describe cómo debería ser nuestra confesión: «Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí.» (Salmo 51:10).
Que esta sea nuestra oración de hoy.
Oración:
Señor dame un corazón firme, limpio y puro y un espíritu recto como clamó a Ti David, para poder yo servirte siempre de primero y con el amor y fidelidad que solo Tu Padre mereces. En El Nombre de Jesús, Amén.
