(Lee al final el estudio contextual resumido de este devocional. Esperamos sea de bendición)
Palabra:
Pero alégrense todos los que en ti confían; Den voces de júbilo para siempre, porque tú los defiendes; En ti se regocijen los que aman tu nombre. (Salmos 5:11)
Está esperar en Dios, y luego está simplemente esperar. Tienes una idea, y aunque estás bastante seguro de que procede del Señor y de su inspiración gloriosa, sigues esperando para actuar. Nuestra mente nos juega una mala pasada y el enemigo nos hace pensar que hay más razones para detener el inicio del camino-incertidumbre sobre los recursos o el apoyo o el momento- y sólo un buen motivo para actuar. Pero, ¿te basta con que Dios te diga: «Ve»? Nunca lo sabrás hasta que des ese primer paso.
Cuando Dios te llame a seguirle, no conocerás todos los pasajes, ni los altibajos del camino. Algo parecido a lo que le sucedió a Abram que el único mensae que recibió fue «ve a la tierra que te mostraré» (Génesis 12:1). Lo único que sabes con seguridad es que Dios, como lo ha prometido, te guiará paso a paso de la batalla, no sólo observándote, sino luchando junto a Ti, mientras agradas Su voluntad
Tras algunos percances, Abram acabó aprendiendo a confiar en Dios. Cuando él y Lot se separaron tras una disputa por unas tierras, Abram dejó que su sobrino eligiera el territorio que quería; pero, en realidad, Abram estaba dejando que Dios eligiera por él. Y mientras Lot elegía Sodoma, Dios acudió a Abram y le dio el resto de la tierra «como posesión permanente» (Génesis 13:15). Dios sabe más, así que déjale ser Él mismo. No te arrepentirás.
Oración:
Señor, Tú cuidarás de mí de formas que no puedo imaginar, y no me dejarás sólo, luchando ante el enemigo. Repondrás mis fuerzas como lo has prometido, y me llenarás con las tuyas cuando no me quede ninguna, para continuar buscando la victoria, que en Tus manos, es segura. En El Nombre de Jesús, Amén.
Resumen de Salmos 5
El Salmo 5 es una oración de David en la que pide la guía y protección de Dios frente a sus enemigos. David comienza el salmo suplicando que Dios escuche su clamor y lo guíe en justicia. Contrasta a los malvados, que Dios aborrece, con los justos, quienes encuentran gozo y refugio en Él. El salmo concluye exaltando la fidelidad de Dios al bendecir y proteger a quienes confían en Él, asegurando su defensa y alegría continua.
Referencias cruzadas de Salmos 5:11
- Salmos 34:8
«Gustad, y ved que es bueno Jehová; dichoso el hombre que confía en él.» - Nahúm 1:7
«Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían.» - Filipenses 4:4
«Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!»