La importancia del pensamiento correcto

Publicado por

Contenido

(Lee al final el estudio contextual resumido de este devocional. Esperamos sea de bendición)

Palabra:

Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él. Proverbios 23:7

La mente es el líder o precursor de todas las acciones. Los pasos que damos cada día son el resultado directo de los pensamientos que nos permitimos pensar.

Si tenemos una mente negativa, tendremos una vida negativa. Por otro lado, si renovamos nuestra mente de acuerdo a la Palabra de Dios, experimentaremos «la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta» para nuestras vidas (Romanos 12:2).

Las luchas de tantas personas tienen sus raíces en patrones de pensamiento erróneos. El pensamiento negativo en realidad puede hacer que creen los problemas que experimentan en sus vidas; Afortunadamente, sin embargo, no tenemos que vivir cautivos de esos pensamientos. Podemos elegir alinear nuestros pensamientos con la Palabra de Dios.

La mente es un campo de batalla. Decide resistir los pensamientos negativos y destructivos, en cambio, piensa en pensamientos compasivos para tu vida. Cuanto más cambies de opinión para mejor, más cambiará también tu vida para mejor.

Oración:

Padre, estoy agradecido de no tener que vivir cautivo de mis pensamientos. Con Tu ayuda puedo cambiar esos pensamientos negativos que están afectando mi vida. Puedo ganar la batalla de la mente pasando tiempo en Tu Palabra, meditando en Tus promesas y haciendo un esfuerzo consciente para tener pensamientos que Te honren en mi vida, pues solo de esa manera podré caminar verdaderamente de Tu mano disfrutando de los grandes galardones que deseas que obtengan cada uno de Tus hijos: la confianza en Tu poder ante una prueba, la paz que sobrepasa todo entendimiento en medio de la dificultad y la vida verdadera que solo se halla buscando cada día seguirte con total fidelidad y renovado compromiso, cuál se renuevan Tus misericordias cada mañana, Señor. Amén

Estudio Bíblico Contextual del Devocional de Hoy:
Resumen de Capitulo Proverbios 23:

Al principio de Proverbios 23 el sabio nos aconseja cómo debemos proceder para evitar la codicia y la avaricia.

Otro consejo importante, es sobre dónde debe estar nuestro foco de atención. En el versículo 5, nos aconseja centrarnos en las cosas que realmente importan. No gastar tiempo y energía en cosas que no aportarán ningún beneficio.

Una vez más aborda el tema: la educación de los hijos, en el versículo 13. La disciplina es muy importante en la vida de un niño. No podemos dejarlos sin límites, haciendo lo que quieran.

Como ser humano, el niño viene con la semilla del pecado en su corazón y está naturalmente inclinado al mal, el amor y la disciplina controlarán sus impulsos y lo harán caminar por el camino correcto.

Por último, en el versículo 26, El Señor pide nuestro corazón. Qué maravillosa es la forma de ser de Dios y cómo nos ama. De una manera suave y amorosa Él desea acceder a nuestras vidas.

Nos pide que nos rindamos y le permitamos gobernar y dirigir nuestros corazones.

Esquema de Proverbios 23:

23.1 – 11: Cuidado con el placer y el deseo de la carne

23.12 – 16: Deberes de los padres

23.17 – 28: Consejos de los padres

23.29 – 35: Advertencias para no perder el control

Referencias cruzadas – Proverbios 23:7:

Salmos 12:2
2 Habla mentira cada uno con su prójimo;

Hablan con labios lisonjeros, y con doblez de corazón.

Salmos 55:21
21 Los dichos de su boca son más blandos que mantequilla, Pero guerra hay en su corazón; Suaviza sus palabras más que el aceite Mas ellas son espadas desnudas.

Mateo 9:3-4

3 Entonces algunos de los escribas decían dentro de sí: Este blasfema. 4 Y conociendo Jesús los pensamientos de ellos, dijo: ¿Por qué pensáis mal en vuestros corazones?

Jueces 16:15

15 Y ella le dijo: ¿Cómo dices: Yo te amo, cuando tu corazón no está conmigo? Ya me has engañado tres veces, y no me has descubierto aún en qué consiste tu gran fuerza.

Proverbios 19:22
22 Contentamiento es a los hombres hacer misericordia; Pero mejor es el pobre que el mentiroso.

Lucas 7:39

39 Cuando vio esto el fariseo que le había convidado, dijo para sí: Este, si fuera profeta, conocería quién y qué clase de mujer es la que le toca, que es pecadora.