Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas. (Proverbios 3:5-6)
Ejercer dominio propio, auto disciplina, y establecer límites y fronteras en nuestras vidas son algunas de las cosas más importantes que podamos hacer. Una vida sin disciplina es una vida llena de descuidos.
La Palabra de Dios establece los límites necesarios para mantenernos en la zona de seguridad de Dios. Nos dicen que podemos hacer, y que es mejor no hacer, para estar seguros. Dios no nos quiere viviendo al extremo, porque si vivimos así, no tenemos una línea que nos diga que la cruzamos.
Las carreteras tienen líneas, una de cada lado y una en el centro. Estas líneas proveen márgenes para nuestra seguridad mientras estamos conduciendo. Si pasamos las líneas, por un lado, caemos a la zanja. Si nos cruzamos sobre la línea del centro, podemos matarnos. Nos gustan esos límites porque nos ayudan a mantenernos a salvo.
Eso también ocurre en nuestras vidas personales. Cuando tenemos límites, fronteras y márgenes, nos sentimos mucho mejor, y experimentamos la paz de Dios.
La clave está en ir a la Palabra de Dios, donde Él ha puesto todos los límites que necesitamos para nuestras vidas. Permita que Dios dirija su camino todos los días.
Palabra Diaria: Dios, reconozco que necesito límites en mi vida. A medida que lea Tu Palabra, muéstrame como aplicar hoy Tus sanos límites en mi vida.