Oración para purificar nuestro corazón.
Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado. (Salmos 51:1-2)
Señor, hoy me acerco a Ti con humildad, reconociendo que necesito Tu gracia para purificar mi corazón. Tú conoces mis pensamientos más profundos, mis intenciones y las luchas que enfrento cada día. Por eso, te pido que examines mi vida y limpies todo aquello que no te agrada. Quita de mí toda impureza, toda amargura, todo orgullo y todo aquello que me aleje de Tu presencia. Anhelo tener un corazón puro, lleno de Tu amor y reflejando Tu santidad.
Señor, ayúdame a guardar mi corazón de todo aquello que contamina mi alma. Líbrame de los malos pensamientos, de la envidia, del resentimiento y del deseo de hacer el mal. Que mis palabras y mis acciones sean guiadas por Tu Espíritu, y que mi mente se enfoque en lo que es verdadero, justo y digno de alabanza. Lléname de Tu paz y enséñame a vivir en integridad, con un espíritu humilde y dispuesto a obedecerte en todo momento.
Padre amado, si hay en mi corazón heridas del pasado que han dejado rencor o dolor, te pido que las sanes con Tu amor. No quiero aferrarme a lo que me hace daño ni dejar que el pecado gobierne mi vida. En cambio, deseo que Tu Espíritu transforme mi ser y me haga más parecido a Cristo cada día. Dame la fuerza para apartarme del mal y la determinación para buscarte con sinceridad y devoción.
Gracias, Señor, porque sé que cuando me acerco a Ti con un corazón sincero, Tú me renuevas y me limpias con Tu amor. Confío en que seguirás obrando en mí, moldeándome según Tu voluntad y haciéndome una vasija útil para Tu gloria. Hoy rindo mi vida ante Ti y te pido que me hagas puro de corazón, para que pueda ver y reflejar Tu luz en todo lo que haga. En el nombre de Jesús, amén.