Oración por fortaleza física y espiritual.
Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán. (Isaías 40:30-31)
Amado Dios de infinita bondad: el azul del cielo resplandece, el rocío del amanecer riega los campos en flor y las aves con su trinar nos avisan que un nuevo día ha llegado. Hoy con muchísima alegría me acerco hasta Ti para darte gracias por el sol que brilla, por el aire que respiro y por todas las bendiciones recibidas.
Gracias también Señor porque en cada día que pasa puedo sentir tu maravillosa presencia en mi vida. Gracias por tu amor, por tu bondad, por darme un hogar, una hermosa familia y por dirigir nuestros pasos por el camino correcto. Amado Dios, por favor protégenos y líbranos siempre de todo mal.
Empieza un nuevo día y es momento de salir al mundo con esperanza e ilusión para poder cumplir con nuestras obligaciones y avanzar en el camino de nuestros sueños. Señor, te pido que estés presente en cada momento que tengamos que sortear, porque solo Tú eres la vida y la misma verdad.
Padre celestial, rodéanos con tu amor, llénanos de tu fuerza y regálanos un poco de tu sabiduría para poder superar las dificultades. Por favor sé nuestro médico y danos salud, sé nuestro guía y llévanos por caminos de bienestar y prosperidad, sé nuestro valle de tranquilidad y consuélanos en la tristeza.
Señor, en este Sábado solo quiero hacer tu voluntad y ser un noble instrumento de tu obra. Revísteme de tu bondad y llévame por el camino del servicio, del bien y del amor.
Amado Dios, gracias por escuchar mi oración. Tú eres mi refugio, mi consuelo, mi guía y también mi fortaleza. Solo Tú me das la paz que mi vida precisa y sé que hoy será un día hermoso, lleno de bendiciones y prosperidad, porque Tú estás conmigo y con tu compañía, todo saldrá bien, En El Nombre de Jesús, Amén.