Ahora conozco que Jehová salva a su ungido; Lo oirá desde sus santos cielos Con la potencia salvadora de su diestra. (Salmos 20:6)
Si estás atravesando un tiempo especialmente estresante, si necesitas respuestas y no parecen llegar, comprométete de nuevo a confiar en Dios. No intentes resolver las cosas por ti misma, sino confía en el Rey de reyes, el Señor de señores, Aquel que te creó y que tiene la solución perfecta.
No pierdas Tu compromiso con Dios, por el tamaño de la adversidad que atraviesas, más bien, refresca tu corazón de las angustias, sabiendo que el poder del Señor es inalcanzable sin importar la dificultad de la prueba. Descansar en el Rey de reyes, El Señor de Señores, en aquel que te creó, es siempre caminar confiando, en que Él ya posee la solución perfecta.
Señor, cuando piense que no me has dado las respuesta que quiero, ayúdame a no olvidar que me proveerás con lo que necesito, en el momento perfecto, conforme a Tu voluntad y no bajo mis tiempos o mis deseos. Hoy me comprometo nuevamente a no dudar en la adversidad y a confiar en que tienes siempre la respuesta correcta para aquellas preguntas que quiero responder en mi vida.