(Lee al final el estudio contextual del versículo de hoy y también las referencias cruzadas del mismo para una mayor profundización en la Palabra del devocional diario)
Por eso, no nos fijamos en las cosas que se ven, sino en las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas. (2 Corintios 4:18)
No centres tu atención en lo que puedes ver en la esfera del mundo físico y natural. Todo lo que percibes es temporal y sujeto a cambio. Así que pon tu fe en el reino invisible y eterno. Las cosas eternas no están sujetas a cambio.
La Palabra de Dios es eterna. En ella hay 7.000 promesas acerca de cualquier situación que puedas enfrentar en la vida. Esas promesas nunca cambiarán, sin importar lo que suceda en este mundo en constante cambio.
No importa lo mal que tu cuerpo se sienta, la Palabra siempre dirá: «…Por sus heridas fueron ustedes sanados» (1 Pedro 2:24). No importa lo mal que luzca tu cuenta bancaria, la Palabra siempre dirá: «Así que mi Dios suplirá todo lo que les falte, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús» (Filipenses 4:19).
Tú no debes resignarte a la existencia precaria que el mundo te ofrece. Toma lo que la Palabra dice que puedes tener. Enfoca tu atención en las verdades eternas de Dios—no en las cosas que puedes ver—. Después de todo, esas cosas están sujetas a cambio.
Oración diaria: Señor, permite que mi vida se guíe por tus caminos. Hazme sabio para abrir mis ojos y observar que la realidad que hoy tengo, es la que quieres para mí. De esa forma podré usar los dones y talentos que me has regalado, para servirte plenamente y para poner mi atención, en lo verdaderamente importante: Tu Reino maravilloso y eterno. Amen.
Estudio Bíblico Contextual del Devocional de Hoy:
Resumen de Capitulo 2 Corintios 4:
En Segunda de Corintios se retoman temas similares a los que Pablo mencionó en su primera carta a esta iglesia. Pablo se alegra de que la iglesia de Corinto haya hecho caso de sus consejos. Al mismo tiempo, es necesario que Pablo contrarreste las críticas sobre su personalidad y legitimidad. La mayor parte de este texto se refiere a ese tema. El quinto capítulo, en cambio, contiene palabras reconfortantes que los cristianos han citado a menudo en tiempos difíciles. Pablo también detalla sus expectativas de que la iglesia de Corinto cumpla su promesa de contribuir a las necesidades de los creyentes que sufren en Jerusalén.
Segunda Corintios 4 sigue la enseñanza de Pablo en el capítulo anterior sobre la transformación que se produce en los que ven la gloria de Dios en Cristo. Algunos están cegados a ella por el pecado. Pablo sabe que él y sus colaboradores son frágiles contenedores del inestimable mensaje de la gracia de Dios mediante la fe en Jesús. Sin embargo, no renunciarán porque Dios les sostiene. Una vez en la eternidad, todo el sufrimiento de esta vida no valdrá la pena compararlo con compartir la gloria de Dios para siempre.
Referencias cruzadas 2 Corintios 4:18
Romanos 8:24-25 – Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo? Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos.
Mateo 25:46 – E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.
Hebreos 11:13 – Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra.
Hebreos 11:25-27 – escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón. Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey; porque se sostuvo como viendo al Invisible.