Publicado por Versículo:
Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas. (Salmos 25:4)
Comentario:
Hay un gran número de personas que se declaran desinteresadas en el conocimiento de las cosas de Dios, especialmente si este conocimiento pasa por la lectura y el estudio de la Biblia; casi siempre vemos a la gente discutiendo sobre Dios desde una perspectiva algo frágil, basada en lo que han escuchado de otros, o por medio de mensajes cortos o pequeños textos de motivación.
Conocer a Dios implica experimentarlo dentro de nosotros mismos. Y, sin duda, eso incluye conocer su naturaleza y su propósito para la humanidad y para el individuo.
Su palabra, la Biblia, nos proporciona esta información en las más variadas formas e intensidades, respondiendo a la mayoría de nuestras preguntas más inquietantes; lo que falta se completa con el sentimiento de fe, indispensable para que podamos absorber este conocimiento, que nos une a Él de memoria.
Esta sed de conocer a Dios más profundamente es lo que motivó al salmista a clamar a Él, tratando de estar listo y atento para escuchar del Señor las pautas que subyacen a una relación profunda y verdadera.
Los hombres necesitan desarmarse emocionalmente para vivir experiencias intensas con Dios.
El salmista clamaba por el discernimiento espiritual y estaba ansioso por recibir la dirección en la que debía caminar y cómo proceder durante el viaje. Esta es la gran diferencia entre los que quieren conocer a Dios y los que están ante Él.
Oración:
Señor, clamo por el discernimiento espiritual para cada día conocerte más y andar siempre en Tus caminos.
